#The sky's the limit

Me muevo con los gatos por todos los tejados. Salto. Salto hacia los vacíos más profundos que puedas imaginar: los psicológicos. Vivo en un silencio suicida donde lo único que resuena es el incansable eco de unos pasos dados a tientas. Lucho. Lucho siempre que puedo por lo que creo justo. Vivo, o al menos eso intento, pero me resulta difícil porque al igual que yo quemé las alas de unos pocos antes, ahora están ardiendo las mías. La música está a tope en mis cascos. El ritmo fluye por mis venas a ritmo preocupante. De mi mente desbordan miles de frases que me ayudan a entender hasta el último rincón de mis pensamientos. Los últimos tiros a ese cigarro mal encendido me están consumiendo más que nunca y los últimos tragos a esa litrona saben más amargos que nunca. No puedo, no debo, no quiero, no entiendo. Al fin y al cabo siempre quise ser palmera en frente del mar para que mi trabajo fuera estar y no pensar en respirar si quiera. Pero siempre he sido de las pocas que eligen llegar a las estrellas por el camino difícil: cruzando montañas...~

{AlmostÉlah.}