No sé ya si quedan anigos...O si existe el amor...Pero tengo claro que estoy sola en esto; ya no queda nadie con quién poder hablar de dolor. No siento nada más que todo esto viniéndoseme encima. Estoy al borde de un abismo y ya no estás tú ahí para abrazarme y decirme que todo va a estar bien. Ya no permanecen junto a mí tus sonrisas, tus bobadas...Esas pequeñas cosas que hacían grande el día a día porque lo vivía a tu lado. Y no he perdido más que a un gran amigo, he perdido a mi confidente y a mi conpañero de sonrisas y abrazos; es inevitable pero le echo de menos...~
{Élahé}
No hay comentarios:
Publicar un comentario